Una oportunidad sostenible para Paraguay
Paraguay tiene una oportunidad única de posicionarse en el mercado internacional y buscar sus primeras emisiones temáticas. Con la próxima Conferencia de Cambio Climático de la ONU, la COP28, a la vuelta de la esquina, ha llegado el momento de hacer esto realidad.*
Cuatro claves para los bancos dispuestos a aprovechar las oportunidades de financiamiento sostenible
Las actitudes de las comunidades de inversión y préstamos hacia los factores ambientales, sociales y de gobernabilidad están cambiando en América Latina y el Caribe. El impacto financiero asociado con eventos climáticos extremos, las crecientes presiones regulatorias y de las industrias sobre el reporte de los riesgos relacionados con el clima, y la mayor disponibilidad de datos, son aspectos clave que influyen en las opiniones de las empresas sobre los factores ambientales, climáticos, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés). Como resultado, el rol de los análisis ESG está cambiando, de una función auxiliar a una parte integral del análisis fundamental y las nuevas propuestas comerciales. La Semana de la Sostenibilidad de BID Invest (evento anual realizado esta ano en Lima, Perú, entre el 7 y 9 de mayo de 2018) tomó el pulso de este cambio, explorando tendencias sectoriales más amplias dentro de la agroindustria, la infraestructura y la banca. Para la comunidad financiera, en particular, hubo cuatro mensajes clave de este evento:
¿Vale la pena la inversión en certificación de aceite de palma?
El aceite de palma tiene una reputación verdaderamente negativa. Particularmente entre defensores ambientales y sociales, el aceite de palma es visto como el cultivo responsable de la deforestación a gran escala, especialmente en el sur este del continente Asiático. La deforestación de bosques con altos niveles de carbono causa a su vez un incremento en las emisiones de gases de efecto invernadero; entre 2001 y 2010. En Indonesia solamente, el uso de tierra para la cultivación del aceite de palma ha resultado en el equivalente de 216-268 millones de toneladas de CO2 por año. Para poner esto en perspectiva, el monto equivale a las emisiones causadas por el manejo de aproximadamente 45 millones de vehículos durante un año. En cuanto a connotaciones negativas, el aceite de palma también ha sido relacionado a problemas sociales, existen también pruebas de violaciones de derechos laborales, incluyendo mano de obra infantil, en muchas plantaciones de aceite de palma.